Ya nada podía sorprenderla, había agotado su existencia entendiendo a los demás, para ella era prioritaria la paz, daba igual que fuera a costa de su propia felicidad..
Felicidad!
Era una palabra comercial, se veía muy bien en los carteles, era bonito ver esas sonrisas perfectas en el comercial del dentífrico..
Pura vanidad
Ella era rara, miraba de frente y veía más allá!
Buscaba en los ojos de los demás vestigios de dolor, las marcas de las heridas que algunos llamaban cicatriz..
Cicatriz!
Conocía el sentimiento, la agonía de ver la carne abierta contando los segundos a que pare de sangrar, la espera interminable para sanar, el dolor atroz..
Y luego, el vacío!
La desconfianza y el temor, la tristeza en la mirada, el rictus de amargura en su rostro, la vejez a destiempo en la piel..
Hasta aquél día
Ver rubor en aquél rostro le sacudió el alma
En sus ojos de nuevo brilló la luz
Y apareció tímidamente una sonrisa que se volvió carcajada
Y entonces le llegó el amor..
Y sintió que volaba!
Nina Laurent
Derechos reservados®
Imagen :Cortesía Google